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Suelta de vaquillas de El Viso (Córdoba). De la dependencia de un señor a la de la abuela Santa Ana.

Suelta de vaquillas de El Viso (Córdoba). De la dependencia de un señor a la de la abuela Santa Ana.

Junto a la Misa y la Procesión de Santa Ana, Patrona de El Viso, la suelta de vaquillas y   toros es sin duda el momento más esperado dentro de la feria y fiestas que tienen lugar en esta localidad cordobesa del valle de los Pedroches a finales del mes de julio. 

Las celebraciones se programan en torno a la fecha del 26 de julio, día de San Joaquín y Santa Ana, en el que comienza la suelta de reses. En total, son siete los encierros que se organizan durante las fiestas, en los que se corren un total de 58 vaquillas y dos toros por las calles viseñas. 

Estas fiestas, declaradas de Interés Turístico de Andalucía en 2008, concentran a un buen número de visitantes durante las celebraciones y, especialmente, en los días grandes del fin de semana en los que llega a duplicarse la población. Muchos de ellos son los propios viseños que tuvieron que irse a trabajar fuera, en la década de los 60, y se reencuentran con su tierra y su gente en estas fechas tan entrañables para ellos.  

El estampido de los cohetes anuncia el comienzo de los encierros, que arranca en los toriles, instalados en el antiguo cementerio, y se desarrolla por las calles El Cristo, Riscalejos y Ramón y Cajal hasta finalizar en la portátil instalada en la Plaza de la Constitución, junto al Ayuntamiento. 

Se trata de un recorrido seguro, de unos 600 metros de longitud y dotado de las preceptivas medidas de seguridad, en el que algunos de los vecinos ponen también barreras y vallas en sus propias casas para evitar que algún astado entre en ellas y les dé una sorpresa, como alguna vez ha ocurrido. Este encierro tiene una duración aproximada de media hora. 

La abuela Santa Ana

El origen de estos encierros cordobeses parte del año 1588, en el que El Viso consigue independizarse del Condado de Santa Eufemia, gracias al Reino de Granada. Desde entonces Santa Ana se convierte en la patrona de esta localidad y para conmemorar este importante logro se organizan una serie de actos festivos, entre los que se encontraba la suelta de reses. Esta independencia trae consigo, por tanto, el nacimiento los encierros, que empiezan a tomar forma en plena Desamortización. De ahí que el dicho señale “que se dejó de tener un señor para tener una señora, la Abuela Santa Ana».

Más de cuatro siglos de arraigada tradición en los que los encierros se han mantenido, junto a otras muchas actividades. En su desarrollo se han producido, no obstante, algunos cambios que han afectado al punto de arranque del recorrido y la plaza donde desembocaban los encierros. En sus primeros tiempos los astados eran guiados por jinetes desde los parajes y dehesas cercanas, en que pastaban en los días previos a las fiestas, hasta los corrales instalados en la villa. Desde allí se dirigían a la antigua plaza, que se realizaba con carros. 

El Corchaito

La portátil, inaugurada en 2009, se realizó gracias a un taller de empleo municipal, en el que participaron 22 mujeres. Lleva por nombre Fermín Muñoz Corchado ‘El Corchaíto», en homenaje al matador de El Viso de los Pedroches, cogido mortalmente en la Plaza de Cartagena en 1914. Precisamente, la peña taurina de El Viso ‘El Corchaito’ se implica de forma muy especial en el desarrollo de estos encierros. Junto al Ayuntamiento vela por la seguridad de todos los participantes y por el respeto que debe tenerse a los astados.