Castilla La-Mancha
Más de un centenar de ganaderías en Castilla La-Mancha
Pese a su amplitud geográfica, y en relación a comunidades autónomas como Madrid y Extremadura, con 105 y 100 hierros, respectivamente, llama poderosamente la atención que sólo 102 ganaderías se distribuyan en tierras manchegas. La mayor parte de ellas, 57, inscritas en la Asociación de Ganaderos de Lidia, seguidas de las 27 de la Unión de Criadores de Toros de Lidia, las 10 de la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas, las 6 de Ganaderos de Lidia Unidos y las 2 de la Asociación de Ganaderos de Reses de Lidia.
Menos de la mitad de los hierros castellanos -un total de 45- se concentran en la provincia de Toledo, mientras que el resto se distribuye más equitativamente en Ciudad Real, con 21 ganaderías, 17 en Guadalajara, 14 en Albacete y 5 en Cuenca.
En la penúltima posición de los hierros castellanos, con 14 ganaderías, figura Albacete. Una cantidad nada desdeñable al lindar esta provincia con tres comunidades autónomas en sus márgenes; las de Andalucía, Murcia y Valencia.
En la distribución de las ganaderías albacetenses la Unión de Criadores de Toros de Lidia registra el número más importante, con la mitad de los hierros. A esos 7 le siguen los 5 de la Asociación de Ganaderos de Lidia y la única inscripción de la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas y también de Ganaderos de Lidia Unidos.
Tras Toledo, la ciudad más al sur de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, limítrofe a Córdoba y Jaén –esta última, una de las más importantes de bravo a nivel nacional- posee también una proporción nada desdeñable de ganaderías.
De las 21 divisas pertenecientes a Ciudad Real, 11 se registran en la Asociación de Ganaderos de Lidia, 5 en la Unión de Criadores de Toros de Lidia y otras 5 en la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas.
Posee el número más pequeño de ganaderías de toda la comunidad manchega, con sólo 5 hierros inscritos. Una cifra muy inferior al del resto de provincias de Castilla-La Mancha, que superan la decena, en el caso de Albacete y Guadalajara, la veintena, en Ciudad Real y alcanzan un total de 45 en Toledo.
Las cinco ganaderías conquenses se reparten en su inscripción en la Asociación de Ganaderos de Lidia, con tres hierros, y una única ganadería en los registros de la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas y de Ganaderos de Lidia Unidos.
En la parte norte de la comunidad manchega Guadalajara es, junto a Toledo y Ciudad Real, la zona con mejor explotación ganadera. En ella se registra la titularidad de 17 hierros. Su vecindad, en la misma latitud con la Comunidad Autónoma de Madrid (una de las más proliferas en la crianza del país) y con Teruel, que posee casi la misma cantidad de hierros que Guadalajara, favorece esta cifra.
La práctica totalidad de las ganaderías de esta provincia pertenecen a la Asociación de Ganaderos de Lidia, con 12 registros, 2 en la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas, otras 2 en Ganaderos de Lidia Unidos y una única inscripción en la Asociación de Ganaderos de Reses de Lidia.
Toledo es la capital de Castilla-La Mancha, pero también de casi la mitad de los hierros que se distribuyen a lo largo y ancho de la comunidad; 45 de un total de 102. Una cifra que no sorprende dada su posición estratégica junto a la Comunidad Autónoma de Madrid y la de Extremadura.
Más de la mitad de las ganaderías toledanas (26) pertenecen a la Asociación de Ganaderos de Lidia y otro porcentaje notable (15) a la Unión de Criadores de Toros de Lidia.
En menor proporción figuran las dos registradas en Ganaderos de Lidia Unidos y la única inscrita en la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas y la Asociación de Ganaderos de Reses de Lidia.